¿Sabía que hay una esfinge en la ciudad de Zadar? Ya no tenemos que ir a Egipto para ver con nuestros propios ojos a este ser místico atrapado en una piedra. Giovanni Smirić es un hombre al que debemos la inolvidable oportunidad de conocer una parte de la cultura exótica en suelo croata. La historia de la esfinge de Zadar comienza en 1901, cuando Smirić, historiador del arte y restaurador, pierde a su mujer. El marido, desesperado, levanta una esfinge como recuerdo del amor con la compañera fallecida en el jardín de su mansión de la bahía de Maestral. La mansión, es decir, Villa Attilija, el parque y la esfinge son monumentos del romanticismo y el clasicismo de la época en que las culturas exóticas se reproducían por toda Europa. Numerosas leyendas se asocian a la esfinge de Zadar, como aquella según la cual la esfinge esconde un tesoro y una tumba, pero nuestra esfinge guarda en silencio el enigma. Muchos creen que, en realidad, ¡la estatua cumple deseos de amor! Sin embargo, aunque no resolvamos su enigma, no nos decepcionará Zadar, la ciudad con mayor número de monumentos y el paseo marítimo más largo de Croacia. Si hemos alquilado un apartamento, habitación o casa de vacaciones en Zadar, conozcamos esta ciudad de maravillosa historia a través de sus monumentos y confiemos nuestro deseo de amor a la esfinge. Quién sabe, quizá se cumpla con la pequeña ayuda de esta imponente escultura de cuerpo de león y rostro de mujer de mirada misteriosa: la esfinge más grande de esta parte de Europa.
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