Drage se encuentra en algún lugar en medio de la costa adriática, de norte a sur. Aunque está en la carretera principal, es un pequeño pueblo tranquilo y apacible, asentado en la bahía recortada que le dio el nombre de Drage (drage: calas). Un montón de pequeñas y pintorescas calas esconden encantadoras playas de guijarros con hermosas vistas a las islas del archipiélago de Kornati. Drage es ideal para aquellos que huyen del turismo de masas, pero quieren echar un vistazo de vez en cuando. Pakoštane, con sus famosas fiestas de verano, está a solo 5 kilómetros, Biograd a 10 kilómetros, la ciudad medieval de Šibenik y Vodice a 30 kilómetros y la popular Zadar a 40 kilómetros de Drage. Joyas croatas como el Parque Nacional de Krka están a solo 30 kilómetros, y el Parque Nacional de Kornati y el Parque Natural de Vransko jezero están prácticamente allí. De esta manera, alojarse en Drage es la forma de conocer Dalmacia en toda su belleza; tranquila, cálida y relajante, y sin perderse nada de la multitud y la emoción del verano. En Drage, encontrará anfitriones agradables y amables y alojamiento principalmente en apartamentos privados. Los habitantes se dedican principalmente a la agricultura, generalmente al cultivo del olivo, y a la pesca, enriqueciendo su oferta gastronómica con aceite de oliva virgen y pescado azul y blanco de alta calidad. Esa es la base de la cocina tradicional dálmata, considerada la más saludable del mundo. Debido a sus conexiones de tráfico, pero conservando la tranquilidad de las tardes de verano, el mar limpio y cálido y el ambiente natural relajante, Drage es un destino turístico cada vez más popular en estos días.
